El primero de los culebrones veraniegos está a punto de resolverse. El jugador del Barcelona Ousmané Dembélé ha sido cazado en la mañana de este jueves en la terminal de vuelos privados del Aeroport de Barcelona, menos de 24 horas después de que el equipo llegara a casa tras su gira veraniega. Allí se disponía a coger un vuelo rumbo a París para estampar su firma en el contrato con el PSG. Junto a él estaba el también azulgrana Kounde.
En las últimas horas, la operación de Dembélé se había acelerado y solo quedaba por concretar cómo se haría efectiva ese traspaso, si el PSG acudiría directamente a la cláusula de 50 millones del jugador y cómo se repartiría ese pago.
Esos flecos han quedado solventados y el PSG podría anunciar el fichaje del jugador durante este jueves. De esta forma, el club parisino sigue acumulando fichajes para contentar a Luis Enrique y hacer olvidar la más que posible baja de Mbappé. Pero este es otro culebrón cuyo final aún no se vislumbra.
El propio Xavi ya había dado por perdido a Dembélé tras su último partido de pretemporada, reconociendo además que la actitud del galo le había "decepcionado" mucho y exigiendo refuerzos a la directiva.
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